Carolina Correa
El polvo blanco invade Quito
Con el pretexto de fomentar mas el turismo, en el año 2008, se dispuso por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores de no pedir visado a los turistas, de cualquier nacionalidad que desean visitar Ecuador, cuya estadía podría extenderse hasta por un lapso de 90 días.
Pero la verdad que lo que se ha fomentado con esta medida ha sido el incremento de los actos delincuenciales. Actos que no existían en el país como los secuestros express, aparición de sicarios que son contratados para matar, ahora hasta los asaltos a mano armada se ejecutan a cualquier hora del día y lugar (cabe mencionar otra nueva ley que ningún ciudadano está autorizado a portar armas de fuego, incluyendo guardias de seguridad) y así podría citar un sin fin de sucesos que han colocado a Ecuador entre uno de los países más inseguros y peligrosos de América.
A esta lista agregaremos un nuevo hecho criminal: la distribución de sustancias ilícitas más conocidas como “LAS DROGAS”. En los últimos meses, habían aparecido cuerpos sin vidas y con señales de torturamiento de ciudadanos nigerianos, colombianos y hasta ecuatorianos en la ciudad de Quito. Finalmente se apreso la semana pasada a los integrantes de una banda llamada “EL Grupo Cordillera”, que pretendía adjudicarse y centralizar la distribución de drogas en la capital; este grupo es dirigido por ex-guerrilleros paramilitares colombianos. Y con esto se destapa una caja de pandora, donde es evidente la existencia de pequeñas células en la ciudad de Quito que venían ejerciendo la función del expendio de drogas a la juventud quiteña.
Y es que parece que el mercado ha crecido tanto, que ahora se ven al enfrentamiento entre ellas para querer dominar la distribución en la ciudad capitalina. Parecía que estuviera hablando de los carteles de drogas que existen en Tijuana y Juárez de la ciudad de México. Sera que pronto tendremos hasta las narco guerrillas en el país también?
Pero quien ha permitido que el país se haya visto infiltrado por este tipo de individuos que lucran a costilla de vidas humanas. Es demasiada coincidencia que a partir de la nueva ley de visas, el país hayan surgido eventos que nunca antes se habían visto. Y es que no estamos lo suficientemente preparados para recibir tantos inmigrantes y ni las habilidades delincuenciales que algunos de ellos poseen.
Esto es tan solo el principio de un mal que es muy difícil de erradicar y espero que el gobierno no se duerma en los laures para poner cartas en el asunto. Recordemos que es de humanos el errar, pero de sabios el recapacitar.
En conclusión, el único polvo blanco que quisiera seguir viendo en Quito es aquel que se divisa a lo lejos en la cima del volcán Chimborazo y no en las calles, donde nuestros niños juegan, donde nuestros adolescentes plantean su futuro.
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